Recomendaciones

Recomendaciones

Bitácora El mar acogedor

Bitácora El mar acogedor

Los relatos de El mar acogedor



Los relatos reunidos en El mar acogedor son en gran medida historias de pequeñas tragedias, algo tan genuinamente griego, en las que los personajes se ven enfrentados a veces sin saberlo, y de forma invencible o inevitable a su propio destino al que desafían aunque es verdad que con poco éxito. Desde luego carecen de la épica y la gloria de los héroes clásicos pero a cambio rebosan humanidad y a pesar de estar abocados a un destino trágico, disfrutan de la vida y afrontan su suerte con valentía, apurando la existencia con entereza y dignidad hasta el último momento.

Una buena mezcla de pecados y virtudes, de pasiones y sacrificios, de ternura y piedad, de heroísmo y sensualidad, flotan en las historias del El mar acogedor, un mar que además de ser el elemento físico mas genuino de las islas, es aquí también la metáfora del fondo, el líquido común que baña a todos estos personajes y sus paisajes.


Vecinos

Vecinos es un relato sobre la relatividad del éxito en la vida y cuenta cómo el éxito material no siempre conduce al éxito personal. En un sentido clásico nos plantea el irremediable castigo que imponen los dioses al pecado de la hybris, a la soberbia de aquellos que se acercan peligrosamente a disputarles su divinidad y que con su éxito pretenden emularles. Un pecado y un castigo fulminantes, pues del extenso catálogo de los pecados humanos, siendo las divinidades tan celosas y envidiosas, el éxito y la gloria de los hombres, es lo que menos perdonan.
En un marco más terrenal la historia nos cuenta cómo el poder corruptor de dinero y la especulación han cambiado el tradicional carácter austero y trabajador en las islas por una afición desmedida al negocio fácil, a la indolencia, la codicia y también a la envidia.
Un asunto tan griego como es la llamada de la sangre, la estirpe y la importancia de la descendencia es otro de los motivos centrales del relato.



 A la manera de Nikos

 


La historia de Nikos es la historia de un solitario vocacional y las dificultades de encaje que tiene un personaje así en una sociedad tan invasiva como la nuestra que señala y margina al disidente. También nos enseña el relato, que la clase no depende de la educación o la fortuna sino que es mas bien una categoría del espíritu.
Nikos es un canto a la ternura, la sencillez y la dignidad humanas, y al afán de libertad llevado hasta las últimas consecuencias.
En una ámbito más griego y subterráneo, es un cuento que nos habla del poder
inexorable del mal de ojo, el xemastiasma, la mala suerte y sus funestas consecuencias. Un tema y un mito extendido en toda Grecia desde la noche de los tiempos que tiene devotos y afines en todas las edades, géneros y condición social, y que ha pervivido asombrosamente hasta nuestros días gozando de amplia aceptación popular 
 

El capitán Aristides 

 


El capitán Aristides es la historia de un naufragio por amor, algo que no es tan extraño como se pudiera suponer y tiene reediciones actuales con más frecuencia de lo que se piensa.
Ulises ya conocía los peligros de enloquecer por el canto de las sirenas y a pesar de estar atado al palo de su nave, suplicaba a sus marinos sordos que le soltaran para echarse en sus brazos. Georgiadis en cambio, sucumbe a la tentación pues tras una dura carrera en el mar quiere y desea echar definitivamente el ancla de su vida aunque tal vez en el puerto equivocado. Es un capitán que comparte muchos valores del héroe tradicional griego, como son el conflicto con el mundo exterior, el coraje ante la vida, el desprecio a la muerte y también una ideología utópica.

Es un relato sobre la prevalencia del destino, el ananké griego, sobre la voluntad humana y también de nuevo sobre del eterno debate entre la pasión y la razón que aflige a los hombres desde el principio de los tiempos y que como hemos visto todavía se acusa más en el tipo mediterráneo.
En otro orden, es un ejemplo de la valentía humana, la que es capaz desafiar al destino y a las normas a pesar de las funestas consecuencias que ello puede comportar como bien sabían los héroes clásicos y todos los que luchan contra fuerzas superiores.


La tumba de Stafilaris 

 


Esta es la historia de un emigrado político y el sentimiento del nostos, el dolor que tiene el ausente que recuerda la tierra que abandonó y la dificultad física y emocional que tiene el emigrado para retornar a una patria que ha cambiado en su ausencia y ya no reconoce. “Aquel que dobla el cabo Maleas pierde su patria para siempre” se decía antiguamente.
El emigrante es una figura que ya era conocida en la época clásica de Grecia cuya expansión en las colonias era tanto una necesidad para la supervivencia de la metrópoli como una dolorosa obligación para los ciudadanos exiliados en ultramar.

El fondo de esta historia transcurre durante la dictadura de los coroneles y plantea el tema del enfrentamiento secular entre los griegos y el poder destructor que tiene la política entendida como una lucha cainita que pretende aniquilar al adversario y hacer tabula rasa de sus legados.
Narra esta historia cómo el enfrentamiento político despiadado y revanchista no sólo destruye a la sociedad, sino también aniquila a familias y amigos que ven truncadas sus vida y relaciones para siempre en aras de unos ideales extremistas muchas veces ajenos a ellos, cuando cegados por la intolerancia ignoran otros valores mas cercanos y próximos y que al final los más lúcidos quieren recuperar cuando es demasiado tarde.
La traición, la culpa y la imposibilidad de la expiación están presentes en el relato.


Comida de año nuevo 

 


Esta narración son en realidad dos historias superpuestas y paralelas que confluyen finalmente en un relato común.
En primer término nos cuenta una historia de navieros enfrentados a muerte por la supremacía de sus negocios. El naviero es una suerte de aristocracia antigua de gran predicamento popular y cuyo origen se remonta al principio de Grecia y ha resistido a todos los avatares de su azarosa historia hasta llegar a nuestros días.
El naviero encarna una figura de hombres poderosos, altaneros y soberbios, pero asimismo patriarcales y con frecuencia benefactores y patriotas; paternalistas y generosos con sus empleados y el pueblo llano entre los que gusta mezclarse y donde son admirados con orgullo.
La comida en Vardulas que da pie al título, es un episodio tragicómico y un homenaje a la mesa griega. La mesa, el banquete o el simposium era ya importante en la época de Platón y encarna las dos pasiones mas características de los griegos, como son las de comer y hablar ya sea con la familia o con los amigos.
La mesa nos conforta de las desgracias y los desaires cotidianos, nos da alegría, consuelo y fuerza. La mesa nos reanima de la muerte imponiéndose la fuerza la vida como lo hace Eros sobre Tanathos.
La deliciosa comida griega aparece a lo largo de todo este libro como un hilo conductor y omnipresente acompañando las alegrías y avatares de los personajes tal y como lo hace en la vida cotidiana de los griegos, con la misma importancia hedonista, social y simbólica que tiene todavía entre ellos.


 Los islómanos 

 


Este relato coral es entre otras cosas y desde el nombre, un pequeño homenaje a mi admirado Lawrence Durrell gran escritor, filoheleno e islómano él mismo, que acuñara este feliz término tan preciso en su libro Recuerdos de una Venus marina, y que vivió largos años en las islas griegas, y a cuyas casas de Corfú y Rodas tuve el placer de peregrinar para intentar captar como él sugería, “el espíritu del lugar”.

El relato se refiere al mito del paraíso perdido y alude a la atracción que ejercen las islas entre mucha gente sobre todo entre los extranjeros que ven en ellas un santuario primigenio, ideal alejado y protegido de los males y miserias de nuestra sociedad, en donde poder refugiarse y reiniciar una vida sencilla y natural lejos del mundanal ruido.

Pero como ya nos advertía Horacio, sólo cambia el cielo y no el alma de aquellos que atraviesan los mares, y si uno llega cargado de sus propias miserias y demonios particulares como equipaje personal, difícilmente la isla va a curar o aliviar a un alma atormentada, pues como bien dice Marcel Proust en la cita inicial del relato, el único paraíso es el paraíso perdido. 
 
Constatino Kavafys en su conocido poema Ítaca nos propone una guía mas sencilla y clara para arribar con seguridad a la isla deseada: venir en paz con uno mismo, ligero de bártulos y sin demasiadas condiciones, lleno de vida como único bagaje y rico en experiencias porque la isla es pobre y no te va a dar riquezas; por tanto cada uno debe llegar liberado y con el corazón repleto. Pero no siempre sucede así como ocurre con nuestros islómanos, cuyas frustraciones, contradicciones y desventuras pueden llegar a convertir la isla más ideal en una hermosa prisión natural.

Hoy en día ya no encontraremos en el camino a los peligrosos lestrigones y cíclopes que nos advertía Kavafys, el peligro está, en estos tiempos que corren, en que las islas cada vez son menos insulares y por tanto menos paradisíacas y que muchos de los actuales residentes ni tienen vocación de islómanos ni tampoco llegan al final del camino como aconsejara el poeta, sino más bien al principio y pretendiendo sin pudor, vivir de ellas. Pero en un país como Grecia, que por fortuna tiene ciento cincuenta islas habitadas y más de nueve mil de todo tipo y tamaño, todavía debe quedar refugios por descubrir para las vocaciones más firmes.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

EL MAR ACOGEDOR - HISTORIAS Y RELATOS DE LAS ISLAS GRIEGAS